"Tabajar en favor de la dignidad y el respecto a las personas"
El 2 de diciembre de cada año se celebra el Día Internacional de la Abolición de la Esclavitud, y se realiza en conmemoración del 2 de diciembre de 1949, fecha en que la Asamblea General de Naciones Unidas aprobó el Convenio para la Represión de la Trata de Personas y la Explotación de la Prostitución Ajena.
António Guterres, Secretario General de las Naciones Unidas señala que: “En la actualidad, la esclavitud se manifiesta a través de la servidumbre basada en la ascendencia, el trabajo forzoso, el trabajo infantil, la servidumbre doméstica, el matrimonio forzado, la servidumbre por deudas, la trata de personas con fines de explotación, incluida la explotación sexual, y el reclutamiento forzoso de niños en conflictos armados.”
En este sentido, se puede reconocer una situación de explotación cuando una persona no puede rechazarla o abandonarla debido a las amenazas, violencia, coerción, engaño o abuso de poder que sufre. Básicamente se trata de aprovecharse de las necesidades económicas para la supervivencia que tienen muchas personas en el mundo.
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) realizó una investigación. El número de niños en situación de trabajo infantil se eleva actualmente a 160 millones en todo el mundo, tras un aumento de 8.4 millones en los últimos años, y varios millones de niños más se encuentran en situación de riesgo debido a los efectos del COVID-19.
El 6.2% de ellas y ellos vive en América Latina y el Caribe, es decir, 8.2 millones. En África subsahariana está casi una quinta parte de las niñas, niños y adolescentes que trabajan en el mundo. Ahí radica el 24% de la población infantil trabajadora, lo que representa 86.6 millones. De esa cantidad, 16.6 millones comenzaron a trabajar a partir de la pandemia.
Ante este panorama, el objetivo 8° de los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 promueve el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todas las personas; no obstante, éste no podrá alcanzarse a menos que se intensifiquen en forma drástica los esfuerzos para eliminar la esclavitud.
Por lo tanto, es necesario “Adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso, poner fin a las formas contemporáneas de esclavitud y la trata de personas y asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la utilización de niños soldados”.