Historia y personajes

Escrito el 19/12/2024
Agustinos


Convento agustino de Castelló de Ampurias

Este convento agustino se denomina de Santa María Magdalena de Ampurias, aunque a veces se le llama de San Agustín, y pertenecía a la Provincia de la Corona de Aragón, en la Parcialidad de Cataluña. Estaba situado en la población de Castellón de Ampurias o Castelló d´Empúries, a pocos kilómetros de Figueras, en la zona del Ampurdán y muy cerca del mar, dentro de la provincia de Gerona.

Parece que el convento agustino se fundó extramuros de Castelló antes del siglo XIV, aunque debido a los ataques de piratas y las guerras hubo que trasladarse al interior de la villa. En el registro de la Curia de Tortosa se cita como prior de la comunidad a Fr. Jaume Montó en la fecha de 1451, lo que confirma la antigüedad de este convento. En 1655, coincidiendo con la Guerra de Cataluña, hubo de ser derribado en el asedio de los franceses y edificado en la actual ubicación, en la zona llamada Torrecabota.

La iglesia tiene un grabado que indica que se concluyó en 1749 sobre un amplio sótano y se dotó de una torre campanario que destaca en el pueblo por su altura y su forma octogonal, siendo uno de los símbolos del Castelló antiguo. El templo es majestuoso y de estilo gótico, que hoy día atrae a los visitantes y sigue manteniendo el culto. Consta de una impresionante nave central de estilo gótico catalán y capillas laterales con la cubierta de tracería gótica muy bella. El claustro del convento es hermoso rodeado con arcos góticos y decorado con columnas escupidas, que trasmiten paz y serenidad. Todavía hoy en la fachada se pueden ver un fragmento de lápida sepulcral judía.

Residían en el convento una decena de religiosos que atendía a los fieles en la predicación y el confesonario. Se cita algunos religiosos destacados como Don Fr. Francisco Planes, obispo de Solsona, pero destaca sobre todo Fr. Maurici Proeta, agustino nacido en Castelló donde profesó. Pasó a Barcelona y Lérida para cursar estudios de Filosofía y Teología y defendió el doctorado en Tolosa. Regresó a Cataluña para predicar por sus pueblos, hasta que decidió ir a Argel y Túnez. En el viaje en barco tuvo que desembarcar en Mallorca al sentirse enfermo, falleciendo en Palma en 1546, siendo enterrado en el convento agustino de Ntra. Madre de Dios del Socorro de esa ciudad. Fue admirado y venerado como un santo por el pueblo y el obispo aprobó su culto, celebrándose su festividad el 20 de febrero. Desde 1550 se veneraba en Castelló su imagen donada a la iglesia del pueblo por los agustinos y en el templo conventual de Santa María de la Magdalena había una capilla a él dedicada. Existe un panegírico a S. Maurici y unos Gozos que exaltan su figura, publicados por el P. Benigno Fernández en 1913. Fue patrono de los tintoreros de Barcelona y se le atribuyen varios milagros.

En 1820 el convento fue clausurado por el gobierno del Trienio Liberal, teniendo que refugiarse los religiosos en el convento de Palamós hasta 1824. Pudieron regresar a su cenobio pero fue cerrado definitivamente con la Ley de Desamortización de 1835, teniendo que abandonarlo los tres últimos religiosos. Se sacó a subasta en 1844 y fue adquirido por particulares así como sus propiedades. Usado como cuartel un tiempo, en época reciente ha sido restaurado, sobre todo su iglesia y la magnífica torre. En el convento se celebran diversos eventos y actividades culturales a lo largo del año, así como conciertos y exposiciones de arte.

Fr.  Ricardo Paniagua