Música: Gregoire Lourne, Africa the Cradle of life
Hay algunos cuya capacidad no puede ser más modesta, y, sin embargo, marchando con perseverancia por este camino de la fe, llegan a aquella beatísima contemplación. En cambio, otros conocen a su modo la naturaleza invisible, inmutable e incorpórea, y también el camino que conduce a la mansión de tan alta felicidad; pero juzgan que no es válido este camino, que es Cristo crucificado, y rehúsan mantenerse en él, y así no pueden penetrar en el santuario de la misma felicidad. La luz de esta felicidad se contenta con emitir algunos rayos que tocan desde lejos la mente de tales sabios.
San Agustín, Carta 120, 4