El Rosario

Publicado el 07/10/2024
Agustinos


Texto:  Pilr  Garrido
Música: Walk in the park. Audionautix

Hoy celebramos el día de la Virgen del Rosario o Nuestra Señora del Rosario. Para mí que estudié en un cole de dominicas ha sido una oración que ha formado parte de mi vida desde bien chica. Recuerdo con cariño la imagen de la Virgen de mi capilla con su rosario colgando junto con el Niño. La festividad de hoy tiene su importancia para la Iglesia católica, es una de las advocaciones de María y es Patrona de los dominicos, de Perú, de Colombia y de la Unidad Militar de Emergencias (UME) en España. Su historia viene desde el siglo XVI; san Pío V instauró su conmemoración litúrgica el 7 de octubre, aniversario de la victoria en la Batalla de Lepanto, en la que las fuerzas cristianas derrotaron a los turcos que estaban invadiendo Europa (atribuida a la Virgen), denominándola Nuestra Señora de las Victorias, pero Gregorio XIII, cambió el nombre de su festividad al de Nuestra Señora del Rosario. León XIII, cuya devoción por esta advocación hizo que fuera llamado el Papa del Rosario, escribió nueve encíclicas referentes al mismo y consagró el mes de octubre al rosario.

La historia cuenta que la Virgen se aparició a Santo Domingo ya que no conseguía que se convirtieran los herejes albigenses, a los que intentaba hacer entrar en razón. Domingo se fue a un bosque y pasó allí tres días y tres noches rezando y haciendo penitencia. El día que se le apareció la Virgen y le dijo:

 - ¿Sabes de qué arma se ha servido la Santísima Trinidad para reformar el mundo?

-  El respondió: Señora, lo sabéis mejor que yo, porque, después de vuestro Hijo Jesucristo, fuisteis el principal instrumento de nuestra salvación.

Ella añadió:

- Pues sabes que la pieza principal de la batalla ha sido el saludo angélico (el Ángelus), que es el fundamento del Nuevo Testamento. Por tanto, si quieres ganar para Dios esos corazones endurecidos, reza mi salterio.

 Solo si la gente considera la vida, muerte y gloria de mi Hijo, unidas a la recitación del Avemaría, los enemigos podrán ser destruidos. Los fieles obtendrán muchas ganancias y encontrarán en mí a alguien siempre dispuesta y lista para ayudarles.